«El hombre está más alejado de sí mismo cuando habla a cara descubierta. Dale una máscara y te dirá la verdad”. Oscar Wilde
El concepto de la máscara, su significado y evolución, transcurre paralelo y refleja el propio devenir e identidad del ser humano en la historia. Su origen se remonta al momento en el que el hombre toma conciencia de sí mismo, y sin embargo, es en la colectividad cuando cobra sentido, en tanto que nos comunicamos con un interlocutor que interpreta el mensaje que deseamos transmitir. La máscara, por sí misma, no tiene razón de ser sin la existencia del otro, del receptor. Pasamos así de lo individual a lo colectivo y general, la parte por el todo, a través de un objeto que se transforma en un símbolo que refleja la dualidad del ser humano.