Para ser linda es necesario seguir ciertas reglas. Siendo pura inseguridad, estas reglas se me hicieron palabra santa y justificaban mi fealdad. Melisa Liebenthal, Las Lindas 2016
Ellas son Camila, Sofía, Josefina, Michelle, Victoria y la propia directora del film, Melisa, las indiscutibles protagonistas de Las Lindas, un documental, que tiene mucho de ensayo, cuyo pistoletazo de salida se sustenta en el autorretrato.
Las Lindas es un documental dirigido por la jovencísima Melisa Liebenthal (Buenos Aires 1991) y que a pesar de ser su ópera prima, ha sido premiada en la sección Bright Future del Festival internacional de cine de Rotterdam, en la tercera edición Asterisco del Festival internacional de cine LGBTIQ, y en el BAFICI 2016, donde obtuvo el premio a la mejor directora en la competencia argentina.
Cartel de las lindas
El próximo 13 de mayo el documental Las Lindas está programado para ser emitido en el conocido Festival Iberodocs 2017 celebrado en Escocia.
En Las Lindas se produce un ejercicio muy sólido de honestidad por parte de la principal protagonista, Melisa, directora del filme, quien casi siempre desde una voz en off y una presencia fuera de campo, se confiesa al espectador como una chica insegura. Queda metafóricamente desnuda ante dicho espectador, planteándose una serie de cuestiones relacionadas con el género femenino y que ya venía reflexionando desde la pubertad.
¿Qué es bello y qué no es bello? Melisa aborda los estereotipos del género femenino basándose en un archivo documental de fotografías viejas donde aparece ella con sus amigas, hecho que la lleva a poder reunirse con ellas, a grabarlas, y a entrevistarlas acerca de cuales fueron sus vivencias a partir de la pubertad y sobre todo de cómo las sintieron. En estos más que sinceros encuentros, Melisa descubre que los miedos y angustias que a ella la obsesionaban – y en cierta medida lo siguen haciendo- fueron miedos compartidos por el resto de las protagonistas en este viaje al pasado que ahora llevan a cabo juntas desde una perspectiva más madura.
Este es un punto muy importante en el documental , ya que pasa de ser una narración guiada autobiográfica a ser extrapolada o los ojos de lo ajeno, que no sólo incluye a las amigas de Melisa si no también al propio espectador, quien toma como propias las reflexiones que las chicas van sacando a la luz para hacerlas suyas y sustituir el rol de voyeaur que tenía hasta momento por el de alguien que interioriza las mismas cuestiones que van poniéndose sobre la mesa.
“Cualquier mirada juzga” afirma Melisa y eso es suficiente para hacer que se sienta permanente en tensión por la necesidad de que su feminidad sea validada por el sexo opuesto. Los cánones estéticos impuestos por la sociedad para cada género suponen para Melisa una falta de certeza implacable en cuanto a su identidad se refiere.
Al terminar el visionado de Las Lindas, uno se da cuenta de que no es un filme que queda cerrado, si no que el ejercicio de autorreflexión que ejecuta la autora, deja mil preguntas en el aire para que quien lo desee, pueda respondérselas a modo personal y poner un punto y final a su propia historia, pero no a la de Melissa, a quien hay que agradecer esa franqueza admirable con la que narra un entrañable relato que va sobre autocrecimiento, exponiéndose al público sin ningún tipo de máscara más que el de la propia cámara tras la que filma el documental.
Título original: Las Lindas
Dirección: Melisa Liebenthal
Guión: Melisa Liebenthal
Reparto: Melisa Liebenthal, Victoria D’Amuri , Camila Magliano, Sofia Mele, Josefina Roveta, Michelle Sterzovsky
Producción: Eugenia Campos Guevara
Fotografía: Lucas Pérez Sosto
Música: Ángeles Otero
Año: 2016
País: Argentina
Duración: 77’
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